martes, 25 de noviembre de 2008

Decálogo menos uno
(Novenálogo)

1- No te duches en tres días. Seguramente tendrás un trabajo más o menos cómodo y coincido contigo en que este es el punto más difícil de la lista. Si te resultara imposible solicitar unas breves vacaciones para convertirte en escritor, no te duches el viernes ni el sábado y espera a la noche del domingo para completar la jugada.
2- Bébete un par de cubatas, si no soportas bien el alcohol puedes ponerle mucha cocacola pero recuerda que lo más importante no es estar borracho si no oler a alcohol. Si fuese necesario puedes derramar la ginebra más barata que encuentres sobre tu ropa.
3- Monta un show en un bar repleto de chicas guapas y rompe un vaso (has de elegir algún bar en el que no haya ningún camarero boxeador que pueda arruinar tu nariz, estos tíos no suelen ser amantes de la literatura hard)
4- Regresa a casa, escribe veinte cuentos en primera persona donde el personaje no se duche, sea pobre, orgulloso y muy talentoso, reniegue publicar, se emborrache y dé escándalos en los bares pijos, se pelee con los camareros y se folle a todas las pijas del bar (naturalmente corriéndose en la cara de cada una). No olvides que tu personaje debe también cagar y vomitar en cada historia. Comprobarás que cuando tienes material interesante eso de escribir es bastante sencillo.
5- Si tus relatos no te parecen suficientemente innovadores quítale las mayúsculas y la puntuación, eso es siempre escandaliza.
6- Si encontraras editor y te dice que vuelvas a puntuar, hazlo pero a tu manera. Eres caótico, no puedes evitarlo.
7- Deberás decir que lo tuyo es el realismo sucio pero recuerda que no te molan bukowski, ni miller ni nadie que mencionen, tú sólo escribes de tu vida, en verdad nunca te ha molado leer. Debes subrayar que repetiste tres veces tercero de primaria, eras un inadaptado desde tu temprana infancia.
8- Si no encuentras editor hazte un blog y deja comentarios incendiarios en los blogs de los burgueses.
9- Cuándo algo no te salga bien has de repetir: es que yo siempre he sido un maldito tío.

2 comentarios:

Lien Carrazana Lau dijo...

...maldito tío, raza abundante en este mundo, yo soy una 'niña buena' que se dizfraza de mala, pero solo por jugar.

Anónimo dijo...

tu eres una chinita buena y hacendosa